Nos dejó Ana María Prieto

Aún no lo creemos.

Todas las personas que estamos en el Centro de Adultos de Bormujos o que hemos pasado por él te recordamos y sentimos tu pérdida irreparable, Ana María.

Fuiste alumna activa del Centro, Ana María Prieto Ruíz, incansanble aprendiz, representante del alumnado para proponer mejoras, cursos, iniciativas, actividades, manualidades, visitas, conciertos, teatros, ¡siempre inventando!

En todos los proyectos te implicabas participando diligentemente. Especialmente recordado el viaje a Polonia que se realizó mediante un programa del centro de intercambio entre Turquía, Polonia y España.

Solías decir que el Colegio te había dado mucho. Pero más aún has aportado al Centro tú, Ana. Siempre dinámica, implicada,… En sus comienzos, movilizando para que adjudicaran más profesorado te presentaste en la Delegación de Educación en Sevilla; después, en continuo contacto afectuoso con el Ayuntamiento de Bormujos solicitando siempre mejoras en el edificio, en cursos, actividades, no podemos olvidar el ascensor… ya que mirabas nuestro centro como tu segundo hogar.

Querida Ana, has sido un ejemplo de vida, una lección de vida, de trabajo, de lucha; siempre con ganas de aprender, curiosa, deseosa de alcanzar la sabiduría, ávida de retos, mujer sin miedo. ¿Quién teme a las nuevas tecnologías?

Pero por encima de todo destacas por ser una buena persona. Dispuesta a ayudar a los demás con alegría. Te faltan manos para dar, dar de lo tuyo, de lo necesario. Gracias Ana.

No te imaginas cuánto te echaremos de menos, nunca te olvidaremos. Te admiramos. Te queremos.

Las flores del Centro que siempre nos llevabas te recordarán como muestra de vida, belleza y alegría.

Dónde quiera que estés ahora, descansa en paz con la admiración y cariño de tus compañeros, maestros y amigos de tu Centro de Adultos, el SEP Bormujos-Los Campanilleros.

Nuestro más sentido pésame a tu familia.

Muchas gracias, ANA.

Muchas gracias

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